En Masinara, una empresa de Bolonia especializada en la producción de marcos de ventanas y persianas, la paletización y despaletización se realizan de forma totalmente automatizada en una isla robotizada en la que robots ABB y almacenes automáticos Modula trabajan en sincronía.
En el área de producción de estampación y ensamblaje de chapas metálicas, el lugar de los antiguos contenedores metálicos ha sido ocupado por 7 almacenes automáticos Modula ML50D de doble bahía exterior, conectados posteriormente a un robot ABB que se desplaza entre las dos filas opuestas de Modula moviéndose sobre una guía lineal ABB TRACK Motion IRBT de 16 metros.
Los almacenes de doble nave exterior, que antes eran operados por operarios, ahora son atendidos de forma totalmente automática por el robot antropomórfico.
Modula y ABB llevaron a cabo el proyecto conjuntamente, coordinando principalmente el proceso del lado del software mediante el cual el software Deck de ABB interactúa con el SGA Modula.
Los procesos gestionados por el dúo ABB y Modula son:
- Despaletizado, es decir, vertido del producto del palé a las cajas de cartón.Los cartones llegan de producción en un palé, que se coloca en la isla. El robot lo recoge y lo identifica con el código de barras. El paquete se pesa para realizar un control de calidad y, a continuación, se vierte en los cajones de la Modula siguiendo un patrón bien definido
- Paletización, es decir, vertido del producto de los cajones al palé.Para lanzar una orden de picking, el SGA muestra el pedido del cliente y crea las misiones de picking, que luego son confirmadas por el software DECK que las ordena según el patrón de paletización anterior. Una vez desbloqueada la misión, el robot se pone en marcha y recoge del cajón del Modula los paquetes necesarios para componer ese pedido. El robot antropomorfo se encarga de la recogida en el cajón exterior del Modula, que no sólo sabe exactamente dónde colocarse, sino que también utiliza una pinza equipada con un sistema de visión artificial para controlar la precisión de la recogida.
Masinara es un ejemplo virtuoso de proyecto insular totalmente automatizado con todas sus ventajas. En primer lugar, en términos de seguridad y ergonomía para el operario, que ya no tiene que manipular paquetes pesados ni trabajar en espacios reducidos y peligrosos.
Al mismo tiempo, el paso a la automatización se ha traducido en una eficacia de los tiempos de preparación de pedidos, ya que la carga de los Modula se efectúa durante las horas nocturnas, cuando los operarios están ausentes.
